Corrupcion, costos y politicas. El caso argentino

El tema de la corrupción es un tópico frecuentemente mencionado en todos los medios públicos y privados y pareciera no haber dudas respecto de su significado. Sin embargo, esa certeza se diluye cuando se pretende profundizar en el análisis y surge la duda respecto de que debe entenderse por corrupción Un criterio bastante generalizado parece entender que se trata de un abuso que, para obtener beneficios privados, realiza una persona o entidad respecto del poder que le han encomendado. No resulta tan fácil definir la corrupción, salvo en las situaciones más evidentes, dado que los comportamientos de los implicados varían y, en general, se ocultan de la vista de la población. En el presente la población de muchos países de elevados niveles de ingresos parecen aceptar como normal la existencia de corrupción entre su clase política. Lo que no puede dejar de ignorarse es que la corrupción se convierte en una ruptura de lo que constituye el fundamento mismo de nuestra sociedad. Destruye el “bien común” para convertirlo en prenda de triunfo de una persona o grupo. Estos individuos pretenden incluso modificar el significado del término corrupción ignorando que es corrupto todo acto que tiende a destruir lo común en beneficio privado, destruyendo también los fundamentos mismos de la sociedad.